Microsoft finalizó oficialmente el soporte para Windows 7 el 14 de enero de 2020 y para Windows 8.1 el 10 de enero de 2023, dos populares versiones de su sistema operativo. El fin del soporte significa que los ordenadores que ejecuten estas versiones de Windows seguirán funcionando, pero ya no recibirán actualizaciones de seguridad ni asistencia técnica de Microsoft, lo que los deja vulnerables a posibles amenazas de seguridad. Windows 7, que se lanzó por primera vez en 2009, ha sido una de las versiones más utilizadas de Windows, con una cuota de mercado de alrededor del 2.62% en 2024. Windows 8.1 se lanzó en 2013 y actualmente tiene una cuota de mercado mucho menor, del 0,31%.
Es posible que muchas personas sigan utilizando estas versiones de Windows y desconozcan los riesgos asociados al uso de un sistema operativo sin soporte. Por ello, se recomienda encarecidamente a los usuarios que actualicen a una versión más reciente de Windows, como Windows 11, para asegurarse de seguir recibiendo actualizaciones de seguridad y asistencia técnica de Microsoft. La actualización a una versión más reciente de Windows puede realizarse comprando un ordenador nuevo con Windows 11 preinstalado o adquiriendo una licencia de Windows 11 y actualizando un PC existente. Aunque la actualización puede suponer un inconveniente y un coste para algunos, es importante tener en cuenta que los riesgos de no actualizar superan con creces los inconvenientes. Sin actualizaciones de seguridad, los ordenadores son vulnerables a las ciberamenazas y se pierden las nuevas funciones y mejoras de las versiones más recientes de Windows.
Bitdefender mantendrá el soporte antimalware para Windows 7 y Windows 8.1 hasta 2025
Bitdefender entiende las dificultades y retos de seguridad a los que se enfrentan los usuarios y pretende esforzarse al máximo para ayudarles a mantenerse protegidos durante los cambios de software. Por ello, Bitdefender seguirá ofreciendo soporte antimalware para Windows 7 y Windows 8.1 hasta el 14 de enero de 2025. Esto significa que las soluciones de seguridad de Bitdefender pueden seguir protegiendo Windows 7 y Windows 8.1 contra el malware, siempre y cuando reciban actualizaciones y soporte para los equipos que ejecutan estos sistemas operativos. Consulte la política de fin de vida útil para conocer cuándo Bitdefender finalizará el soporte antimalware para estas versiones de Windows.
El soporte antimalware no sustituye a las actualizaciones de seguridad de Microsoft
El soporte antimalware hace referencia a las actualizaciones de seguridad continuas y al soporte proporcionado por las empresas de tecnología de ciberseguridad para proteger los equipos que ejecutan Windows 7 y Windows 8.1 frente al software malicioso. Cuando Microsoft finaliza el soporte para una versión de Windows, también finaliza el desarrollo y la distribución de actualizaciones de seguridad para esa versión. Como resultado, las versiones no compatibles de Windows, como Windows 7 o 8.1, se vuelven vulnerables a las amenazas de seguridad. Es importante tener en cuenta que, aunque el soporte antimalware de Bitdefender puede ayudar a proteger contra las ciberamenazas, no sustituye a las actualizaciones de seguridad proporcionadas por Microsoft. El software antimalware no puede corregir las vulnerabilidades del sistema operativo que podrían ser explotadas por los hackers.
Como tal, aunque el soporte antimalware puede proporcionar una capa adicional de protección, sigue siendo muy recomendable que los usuarios de Windows 7 y Windows 8.1 migren lo antes posible a una versión más reciente de Windows para asegurarse de que siguen recibiendo actualizaciones de seguridad y asistencia técnica de Microsoft, aprovechando al máximo las últimas tecnologías de seguridad.